Más también si alguna cosa padecéis por causa de la justicia, bienaventurados sois. Por tanto, no os amedrentéis por temor de ellos, ni os conturbéis,
1 Pedro 3:14
Nuestra seguridad depende del poder de Dios, y si el poder de Dios es infinito; nosotros, como cristianos, no debemos temerle a nada. Aquellos que están contra nosotros y quieren hacernos daño, son enemigos de Dios y, por lo tanto, Él se encargará de que no nos hagan nada sin Su consentimiento.
El miedo que sentimos es simplemente la falta de comprensión de que Dios tiene todo bajo control y no hay absolutamente nada que sea más poderoso que Dios. Cuando aprendemos a confiar en aquel que controla todas las cosas, entonces conoceremos la verdadera paz y viviremos sin miedo.
Sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros;
1 Pedro 3:15
A la única persona que debemos temer es a Dios, pues Él se merece nuestro respeto y veneración.
12 No llaméis conspiración a todas las cosas que este pueblo llama conspiración; ni temáis lo que ellos temen, ni tengáis miedo. 13 A Jehová de los ejércitos, a él santificad; sea él vuestro temor, y él sea vuestro miedo.
Isaías 8:12-13
4 Mas os digo, amigos míos: No temáis a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. 5 Pero os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, os digo, a este temed.
Lucas 12:4-5
En ocasiones, nos preocupa nuestra seguridad, en otras, nos preocupa nuestro futuro. Pero este también está en las manos del Señor. No debemos temer a lo que está por venir. Dios nos da la gracia para continuar en cada etapa de nuestras vidas.
Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
Mateo 6:34
Jesús nos dice en la biblia que vivamos un día a la vez. No es necesario afanarnos, por lo que haremos en 20 años o en 10 años. Lo único que debemos hacer es enfocarnos en seguir a Cristo y obedecerle siempre.
Cada día, el Señor nos permite respirar y llevar a cabo nuestras tareas con Su liderazgo y gracia. Y al enfrentar un obstáculo, Él nos sacará victoriosos siempre y cuando mantengamos nuestros ojos puestos en Él.
¡Dios te bendiga!
Pastor Wiliam Recinos.
